Durante este último mes, prácticamente todos los días me hago la misma pregunta ¿Como explicar todo este huracán de sentimientos? Hoy me siento con ganas de responderla. Empezare por hablar sobre el miedo, miedo a perderte ahora que te he encontrado, miedo a que no sea lo mismo para los dos, miedo a que esta maldita distancia acabe por anteponerse a ti, a mi, a esto que tenemos. También he de mencionar la felicidad, esa que hace que cada día me despierte con una sonrisa, me coloca cara de boba y me deja actuar libremente sin pensar en las consecuencias. Pero ésta se encuentra limitada por su enemigo, la tristeza que en ciertos momentos y sobre todo en las noches oscuras se apodera de mi haciéndome consciente de lo lejos que te encuentras, haciéndome saber que una noche más no habrá besos, ni abrazos, ni siquiera cosquillas que recorran dulcemente mi tripa..
No estoy segura si ésto es amor u otra cosa, lo cierto es que nunca antes lo había sentido, no al menos tan intensamente como contigo, quizá sea por nuestra amistad, quizá por la confianza que compartimos o quizá simplemente porque eres Tú, la persona dispuesta ahí para mi. La verdad es que desconozco la razón, pero si algo sé a ciencia cierta es que estoy acojonandome sin ti...
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